Hospitales saturados las obligan a dar a luz en el hogar
De la redacción
México DF, 13 enero 09 (CIMAC).- El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) declaró en un comunicado su extrema preocupación por la penosa situación de los civiles en la Franja de Gaza, particularmente las mujeres embarazadas y la infancia, y reiteró el exhorto del Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y de todas las demás voces que han instado a un cese inmediato de las hostilidades militares que causan graves daños a la población civil.
“Exhortamos a que se permita sin demora el ingreso a Gaza de la asistencia humanitaria, inclusive el suministro de alimentos, y artículos y equipo de uso médico”, dijo la directora ejecutiva del UNFPA, Thoraya Ahmed Obaid. “Esto tiene importancia crítica para responder a las urgentes necesidades de 1.5 millones de habitantes de Gaza, especialmente las mujeres, las y los niños”.
Incluso antes de la erupción de las actuales hostilidades, el cierre impuesto a los accesos a Gaza suscitó especiales trastornos para las mujeres, los lactantes y las y los niños, dijo. Las embarazadas tropezaron con obstáculos para tener acceso a los servicios de salud materna, lo cual, sumado a la pobreza generalizada, redundó en altos niveles de anemia y malnutrición.
La crisis actual está aumentando esos riesgos, pues las salas de maternidad se utilizan como salas de cirugía para atender a los heridos, con lo cual aumenta la cantidad de mujeres forzadas a dar a luz en el hogar, con el riesgo de sufrir lesiones derivadas de la maternidad y a perder la vida. Con ello, dice el comunicado, silenciosa e invisiblemente se van agregando cantidades desconocidas al número de personas muertas y heridas como consecuencia de la acción militar.
Además, el desplazamiento de familias, tras la destrucción total o parcial de sus viviendas, está imponiendo graves efectos físicos y psicológicos, en particular sobre las mujeres y las y los niños.
Como respuesta a las secuelas humanitarias del conflicto, el UNFPA, junto con otros organismos del Sistema de las Naciones Unidas, ha entregado medicamentos, líquidos endovenosos y suministros médicos desechables a los principales hospitales de Gaza.
También ha brindado apoyo a las mujeres desplazadas y sus familias. Pero esta asistencia no es suficiente y es mucho más lo que queda por hacer, afirma el organismo y exhorta a la apertura de todos los cruces para posibilitar que la asistencia humanitaria llegue a los más afectados por la acción militar.
09/VRI/GG
De la redacción
México DF, 13 enero 09 (CIMAC).- El Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) declaró en un comunicado su extrema preocupación por la penosa situación de los civiles en la Franja de Gaza, particularmente las mujeres embarazadas y la infancia, y reiteró el exhorto del Secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, y de todas las demás voces que han instado a un cese inmediato de las hostilidades militares que causan graves daños a la población civil.
“Exhortamos a que se permita sin demora el ingreso a Gaza de la asistencia humanitaria, inclusive el suministro de alimentos, y artículos y equipo de uso médico”, dijo la directora ejecutiva del UNFPA, Thoraya Ahmed Obaid. “Esto tiene importancia crítica para responder a las urgentes necesidades de 1.5 millones de habitantes de Gaza, especialmente las mujeres, las y los niños”.
Incluso antes de la erupción de las actuales hostilidades, el cierre impuesto a los accesos a Gaza suscitó especiales trastornos para las mujeres, los lactantes y las y los niños, dijo. Las embarazadas tropezaron con obstáculos para tener acceso a los servicios de salud materna, lo cual, sumado a la pobreza generalizada, redundó en altos niveles de anemia y malnutrición.
La crisis actual está aumentando esos riesgos, pues las salas de maternidad se utilizan como salas de cirugía para atender a los heridos, con lo cual aumenta la cantidad de mujeres forzadas a dar a luz en el hogar, con el riesgo de sufrir lesiones derivadas de la maternidad y a perder la vida. Con ello, dice el comunicado, silenciosa e invisiblemente se van agregando cantidades desconocidas al número de personas muertas y heridas como consecuencia de la acción militar.
Además, el desplazamiento de familias, tras la destrucción total o parcial de sus viviendas, está imponiendo graves efectos físicos y psicológicos, en particular sobre las mujeres y las y los niños.
Como respuesta a las secuelas humanitarias del conflicto, el UNFPA, junto con otros organismos del Sistema de las Naciones Unidas, ha entregado medicamentos, líquidos endovenosos y suministros médicos desechables a los principales hospitales de Gaza.
También ha brindado apoyo a las mujeres desplazadas y sus familias. Pero esta asistencia no es suficiente y es mucho más lo que queda por hacer, afirma el organismo y exhorta a la apertura de todos los cruces para posibilitar que la asistencia humanitaria llegue a los más afectados por la acción militar.
09/VRI/GG
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