1/17/2016

Alza del dólar lacera al campo mexicano; si continúa la volatilidad millones de unidades de producción quebrarán


Demanda campesinos, Presupuesto de egresos
    

(17 de enero, 2016. Revolución TRESPUNTOCERO).- La disparidad entre el peso y el dólar comienza a afectar a diversos sectores del país; uno de ellos el mercado agrícola mexicano.
De acuerdo con la organización El Barzón, el alza en el dólar ha presentado sus primeros efectos en los precios de semillas y fertilizantes, cuestión que empieza a afectar a los productores del campo mexicano.
Esta organización advirtió que de continuar con este panorama de disparidad, así como de caída de los precios internacionales en los granos básicos, los productores del campo mexicano podrían sumergirse en una quiebra financiera. Además destacó que la intención del gobierno mexicano por poner en marcha acuerdos como el Transpacífico-el cual vulneran a los productores agrícolas-pone en una situación de indefensión a los campesinos.
“Para el caso de los productores de granos básicos y leguminosas, el panorama de producción no es muy alentador. Si continúa así la volatilidad financiera y la caída internacional de precios de granos básicos,  millones de unidades de producción agrícola caerán en una situación de quiebra e incertidumbre económica, anulando las posibilidades de rentabilidad de los productores mexicanos. A eso se agrega, la intensión de poner en vigor nuevos acuerdos internacionales, como el caso del ATP (Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica)”, dijo.
El Barzón destacó que desde comienzos de 2015, cuando el dólar se colocaba en los 16 pesos con 30 centavos, el precio de los insumos agrícolas ya resentía la disparidad. En este sentido dijo que para el ciclo de producción primavera-verano 2015 los precios de producción ya habían absorbido el aumento.
“Para el ciclo primavera-verano del 2015, el costo de producción en el caso de los estados de Sinaloa, Chihuahua, Durango y Zacatecas, aumentó considerablemente. Por mencionar un ejemplo, el amoniaco aumentó de 10 mil a 13 mil pesos por tonelada y la mezcla de fertilizantes de 8 mil a 12 mil pesos por tonelada. Para el ciclo otoño-invierno 2015, los productores de agricultura por contrato sembraron con un costo de producción de 30 mil pesos, y ahora el costo del paquete de producción alcanzará un precio de 33 mil 690 pesos presentando un alza desde 10%  al 16 %, para finales de 2015”, explicaron.
La organización destacó que con el dólar a 18 pesos con 35 centavos, el costo de los insumos se agrava aún más. En el caso del fertilizante, señaló, el alza podría llegar hasta 20% o 35%, lo cual representaría pérdidas para los productores ya que se sumaría a la caída de los precios internacionales de los granos.
“En el caso de semillas, el precio de la bolsa de 25 kg de semillas de maíz pasó de 3 mil 150 pesos a 3 mil 550 con el dólar a 17 pesos con 50 centavos. Eso sin contar que hace unos días el dólar se cotizó en los $18.35 pesos y si continua así muchos productores podrían tener enormes pérdidas, pues se requiere de un 80% de la inversión para compra de insumos para la producción como semilla, fertilizante, agroquímicos, electricidad y pago de agua (para el caso de riego)”, explicó.
Aunado a este panorama adverso, El Barzón señaló que el control monopólico de algunas compañías sobre el mercado de semillas, fertilizantes o maquinaria hace aún más difícil el contexto. Reiteró que la dominación de un puñado de empresas en la fase de suministro de insumos, así como en el acopio y comercialización de la cosecha, ha sido un obstáculo para los productores mexicanos.
Ante este panorama, El Barzón urgió al gobierno mexicano a tomar cartas en el asunto. En primera instancia exigió la implementación de mecanismos que rompan con los monopolios en el sector agroalimentario.
“Exigimos al gobierno que cumpla con los acuerdos para elevar la productividad del campo, así como establecer un mecanismo de compras consolidadas de semilla y fertilizante y ajustar la tarifa de energía eléctrica, para así lograr una reducción en los altos costos de producción, y apoyar la comercialización, para reducir los costos de intermediación, en beneficio de los productores y consumidores”, concluyó la organización.

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