El fundador de NXIVM, de 58 años, y quien está en prisión desde su arresto en marzo de 2018, está acusado de tráfico sexual con adultos y menores; posesión de pornografía infantil; explotación sexual de un menor y chantaje, cargos por los que podría enfrentarse a un máximo de cadena perpetua si es condenado.
El juicio se lleva a cabo en la corte federal de Nueva York, misma ciudad a donde, según Hajjar, el fundador de NXIVM atrajo una familia mexicana en 2005 bajo la promesa de apadrinar a sus tres hijas en la organización que se promocionaba como una firma de desarrollo personal.
La fiscal relató que el falso gurú de la motivación convirtió la vida de las chicas mexicanas en un infierno. Las mantuvo recluidas y las enfrentó entre ellas en una guerra de favoritismos.
Camila, entonces de 15 años, fue quien Raniere consideró su primera “esclava” y fue presionada para reclutar a otras mujeres para que se acostaran con Raniere, según publicó el New York Post.
Daniela, otra de las hermanas, sufrió represalias por parte del “gurú” luego de que saliera con otra persona. Ella fue encerrad en una habitación durante dos años antes de ser enviada de vuelta a México.
Una de las mujeres reclutadas por Camila fue BNikole, quien –según las acusaciones– el día que tuvo su encuentro con Raniere fue atada a una mesa desnuda y con los ojos vendados. En aquella ocasión, presuntamente Camila le practicó sexo oral a la joven a petición del acusado.
Raniere “fingió ser un gurú pero era un criminal”, Hajjar en la audiencia, acusación que fe rebatida por Marc Agnifilo, abogado de Raniere quien describió a su cliente como un “buen hombre” con “buenas intenciones” que quiso crear una “hermandad” para mujeres.

Nexos con políticos mexicanos

Según medios locales, Camila se presentará ante la Corte a testificar contra Raniere y se espera que con éste y otros testimonios salgan a la luz otras historias que involucren a miembros renombrados de familias mexicanas que fueron encantados por este personaje y sus cursos de autoayuda, entre ellos Emiliano Salinas, hijo del expresidente Carlos Salinas de Gortari quien, tras el escándalo, se deslindó de NXIVM.
Emiliano Salinas Occelli, fue relacionado con Keith Raniere en 2017, al ser copropietario de una empresa que replicaba en el país los programas y talleres impartidos por el hoy detenido.
Durante seis meses, el hijo del expresidente pasó de defender al presunto “gurú de la motivación”, a deslindarse totalmente de su antiguo mentor e incluso a renunciar a la empresa que representaba su marca.
Además del hijo del exmandatario priista, Keith Raniere tuvo entre sus filas a Alejandra González Anaya, hermana de José Antonio González Anaya, exsecretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP); y a las hermanas Carola, Loreta y Jimena Garza Dávila, empresarias de Nuevo León, Monterrey.
Una de las hermanas, junto a Omar Boone Sabag, eran socios de la empresa Milliare, la cual emitía facturas para quienes tomaban los cursos de Executive Success Programs (ESP) en el estado. Milliare tenía la misma dirección que el Centro ESP en Monterrey.
También figura en la lista Fabiola Sánchez de la Madrid, esposa de Federico de la Madrid Cordero, quien es hermano de Enrique de la Madrid, exsecretario de turismo federal. Su tercer hermano, Miguel, también fue parte de NXIVM y acudió a uno de los cursos que la organización impartía en su sede central en Albany, Nueva York.
Los tres son hijos del fallecido expresidente Miguel de la Madrid Hurtado.

La farándula, también involucrada

El caso de Raniere ha generado interés en Estados Unidos por su carácter escabroso y por la implicación de dos nombres célebres: el de la actriz Allison Mack, de “Smallville”, y la heredera del conglomerado licorero Seagram’s, Clare Bronfman. Ambas se han declarado culpables junto a otras tres acusadas.
De acuerdo con documentos de la corte, el juez del caso, Nicholas Garaufis, rechazó el pasado viernes una moción de la defensa de Raniere para excluir como pruebas fotos que constituyen pornografía infantil halladas en un dispositivo USB que se incautó en un registro en su casa de Nueva York bajo orden judicial.
En el dispositivo había imágenes sexualmente explícitas de mujeres asociadas a NXIVM, entre ellas dos acusadas en el proceso, Lauren Salzman y Kathy Russell, y “dos imágenes de una mujer desnuda” que los agentes “reconocieron como una esclava” con la que Raniere tuvo sexo cuando ella tenía 15 años, posiblemente Camila.
Raniere ha negado los cargos y su defensa sostiene que sus relaciones eran consensuadas. Sin embargo, se espera que durante el juicio que se alargará unas seis semanas, algunas supuestas “esclavas” sexuales testifiquen, así como las otras cinco acusadas que admitieron delitos como parte de acuerdos.
Los doce miembros del jurado fueron elegidos este lunes tras una fuerte criba y el magistrado dictó que el panel sea anónimo (por lo que en el juicio se referirán a ellos por número) y que sea escoltado a su entrada y salida de la corte.