11/18/2008

DEBATE por un Programa Revolucionario de Lucha Anticapitalista


Por Colectivo Noticias de la Rebelión

Los tiempos que corren precisan cada vez más de un Programa Revolucionario de Lucha que aglutine a los distintos colectivos, grupos, series e individuos que somos de abajo y a la izquierda; donde esté expresado, no solamente la necesidad de continuar la lucha anticapitalista sino también, en cierta manera, la planificación de los pasos que nos han de llevar a la victoria y aun más, tener claro que es lo que vamos hacer cuando esa victoria la hayamos alcanzado, ello tanto a nivel local como mundial.

El Che, siguiendo a Marx, diría que no basta solamente con creer empíricamente que otro mundo es posible sino que es preciso sustentar científicamente que la revolución social podemos llevarla a la realidad. Empresa díficil sino se cuentan con postulados metodológicos claros a partir de los cuales desarrollar la argumentación. La revolución social ha sido un experimento recurrente a lo largo de la historia de la humanidad, sin que ello signifique que tal experimento haya sido llevado a cabo con las mismas ideas y por los mismos grupos y clases sociales.
En este sentido es importante reconocer que las revoluciones que dieron nacimiento al capitalismo y han estado presentes al interior del mismo y que en algunos casos han hecho posible reformarlo, han sido revoluciones burguesas.
Desde la revolución industrial, pasando por la revolución francesa, las olas revolucionarias del siglo XiX (la independencia de la colonias en américa…) y las luchas de liberación en países de África y asia en el siglo XX, e incluso la mayoría de las revoluciones de principios del siglo XX, han sido procesos de revolución burguesa. Es decir, procesos en los que cierta estructura, ciertas normas y cierta ideología eran fuertes trabas para el desarrollo y crecimiento capitalista como un sistema de producción hegemónico; resultado de lo cual se sucedieron movimientos sociales, en su mayoría de casos, policlasistas, que impulsaron cambios importantes en sus sociedades, lo cual a la larga, como es evidente, no ha significado el fin de la explotación del hombre por el hombre. Tampoco podemos dejar de mencionar que han sido ciertos grupos de la misma burguesía y de clase media -algunos de tendencia radical, otros no tanto, quiénes han capitalizado los movimientos sociales, haciendose del poder del Estado y posibilitando una renovación y reimpulso al capitalismo como sistema de dominación presente en sus territorios y a nivel mundial.
Este papel jugado por la burguesia y las clases medias no debe extrañarnos, de ellas ha dependido que estas revoluciones las podamos caracterizar como revoluciones burguesas (o democrático burguesas, dirían otros). No exageramos y tampoco demeritamos la acción de individuos y pueblo trabajador en estos movimientos, como tampoco demeritamos la acción represiva de los estados, las burguesías y sus ejércitos, simplemente pensamos que hay que ser realistas.

Hemos preguntado recurrentemente en distintos ocasiones.

Invitación a DEBATE por un Programa Revolucionario de Lucha Anticapitalista

¿Si las revoluciones burguesas las “hace” la burguesía, quiénes hacemos las revoluciones anticapitalistas?

No obstante, lo que nos parece aun más importante preguntarnos es

1) ¿cómo hacemos una revolucion anticapitalista? ¿Cómo desestructuramos al Estado burgués? ¿Cómo avanzamos en el proceso de expropiación y autoconstrucción de medios de producción, y de construcción de medios de comunicación libres?

2)¿Qué normas, qué valores, qué ritmos, qué símbolos deben estar presentes en el proceso de construcción de relaciones anticapitalistas a partir de los cuales pretendemos fundar un nuevo sistema social?

3)¿se puede destruír el capitalismo en un solo pais? ¿Si queremos asegurar una próxima sociedad sin clases, que tipos de organización estamos proponiendo para este fin? Siendo el estado instrumento de dominación de una clase sobre otra y dado un contexto mundial de presión e intervención sobre páises en sociedades inmersas en procesos revolucionarios, es necesario un estado de trancisión ¿qué formas debe presentar ese estado para que esté garantizado avanzar a una sociedad sin clases?

4) y finalmente, ¿bajo que presupuestos ideológicos y culturales vamos impulsarla?, ¿cuál es ese mundo que deseamos por el que vamos hacer una revolución anticapitalista?

Cómo habrán notado estamos hablando de revoluciones anticapitalistas y no de revoluciones socialistas, proletarias, comunistas, nacionalistas o anarquistas. El punto es que esas caracterizaciones son parte del debate necesario que hay que dar. Así que nosotros proponemos debatir en torno a las revoluciones anticapitalistas. Creemos que puede ser un punto de partida importante para no limitar la discusión.

Para impulsar este debate en los próximos dias vamos a publicar distintos programas de lucha que han emitido las más diversas organizaciones revolucionarias en todo el mundo. Consideramos importante publicar estos documentos porque representan un aporte teórico-práctico importante de experiencias pasadas, que necesitamos integrar al debate que hoy tenemos en cuanto a la construcción de un programa revolucionario de lucha. De otra manera podríamos estar cometiendo los mismos errores que ellos cometieron o aun peor podríamos estar ignorando grandes aportaciones teorico-practicas que se han hecho.
Es decir, esas experiencias deben servirnos para saber si estamos teniendo una percepción correcta de la realidad; para saber si estamos imaginado correctamente las consecuencias de nuestros actos supuestamente revolucionarios; para saber si estamos eligiendo correctamente los pasos a seguir para concretar la revolución; nos permitirá saber si nuestras creencias son correctas (hipótesis) y además nos permitirá saber si estamos realizado correctamente el propio acto de realización, de experimentación, de esta revolución en esta nueva ola revolucionaria que estamos viviendo y en la que, pensamos posible, acabar con la sociedad de clases.

Finalmente queremos invitar a todos ustedes, a los distintos grupos, organizaciones e individuos que tengan interés en participar, a que nos envíen sus colaboraciones (para ello hemos propuesto algunas preguntas). Con gusto las publicaremos. Solamente queremos pedirles que sus argumentaciones en torno a su propuesta de un programa revolucionario de lucha tenga fundamento empirico en sus propias experiencias en las que han participado o estén participando de tal manera que dichos programas puedan ser contrastados con la realidad concreta.


Les pedimos que envíen sus colaboraciones al correo:

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