Por: Emma Martínez
(11 de agosto, 2015. Revolución
TRESPUNTOCERO).- Tras varios años de investigación sobre la migración
indocumentada a Estados Unidos, llamó la atención a los académicos el
caso de San Juan Chamula, Chiapas, en donde no habían existido casos de
migración antes del 2000, fue en ese año que dos muchachos decidieron
intentar llegar al país del norte, para el siguiente año se marcharon
otros cuatro, posteriormente 16 y para el 2006 el movimiento era
imparable.
Según información del Centro de
Estudios Superiores de México y Centroamérica (Cesmeca), a partir del
2004 se observó que hubo un gran movimiento de la comunidad indígena de
esa zona y muchos chiapanecos jóvenes que se fueron a Estados Unidos,
“durante esos años se fueron cientos de miles de chiapanecos”.
En aquella comunidad hasta 2013, para
poder emprender un viaje con destino al norte, se necesitaba hasta 20
mil pesos, los préstamos al rédito eran al 10 %, después del 2005, las
familias se encontraron con una grave crisis económica, quienes
fracasaron y fueron deportados, tuvieron que desprenderse de sus pocas
pertenencias de valor, y quienes ya vivían en Estados Unidos, pero no
habían logrado conseguir un trabajo que les ayudara a pagar su deuda y
vivir en aquel país, regresaron porque cada mes la deuda crecía aún
más, y no habían podido conseguir en los primeros meses, ni lo
invertido en el viaje.
“Los primeros que se fueron encontraron
trabajos bien pagados, pudieron pagar sus préstamos en un año. Los que
se fueron después del 2005 que es más de la mitad de ellos, encontraron
el problema económico en Estados Unidos y no consiguieron trabajo
fácilmente, entonces no pudieron pagar, ya que de 20 mil pesos subieron
sus deudas a 30, 40 y en varios casos hasta 80 mil pesos”, se da a
conocer en el informe.
“San Juan Chamula vive dificultades que
lo han llevado a la pobreza extrema desde los desplazamientos de 1980,
que con el tiempo se han intensificado, aunado a esto se encuentra el
caciquismo priista que ha afianzado su poderío en el territorio de los
pueblos indígenas, lo que ha generado mayor migración, interna pero
principalmente externa”, declara a Revolución TRESPUNTOCERO
un miembro de la dirigencia de la Coalición Indígena de Migrantes de
Chiapas, (CIMICH), quien no accedió a que se publicara su nombre.
“En San Juan Chamula, los presidentes
municipales son los mismos polleros que mandan o expulsan a su gente,
los convencen que no hay trabajo, que deben salir para tener más dinero
o incluso los obligan bajo amenazas, tratan a los compañeros como una
mercancía. Los ediles no solamente cobran por cruzar la frontera a
gente de la zona Alta, sino también mantienen tratos con los migrantes
centroamericanos…
Sin duda alguna, la principal
intención del caciquismo es arrebatar los terrenos a los indígenas, es
por ello que los convencen de irse de la comunidad, bajo la falsa
promesa que podrían llegar a ganar mucho dinero, ellos se ofrecen a
transportarlos, finalmente se da la migración forzada”, asegura la
fuente.
Actualmente en San Juan Chamula, a la
par de la salida de indígenas en busca del ‘sueño americano’, también
se propicia la migración interna, producto de haber perdido sus
propiedades, ya que anteriormente con seguridad cedieron al pollero las
escrituras de sus terrenos o a los prestamistas, que les facilitaron
cierta cantidad para poder pagar su viaje.
Las consecuencias llegan cuando muchos
indígenas no logran cruzar el desierto, son atrapados y deportados, al
llegar a sus comunidades ya no tiene absolutamente nada y tampoco cómo
pagar para recuperar su propiedad, lo que provoca que emigren a
comunidades cercanas donde exista una vivienda, con una renta económica
que pueda cubrir.
“Aquí lo lamentable es que son los
mismos alcaldes quienes facilitan el proceso de la migración, fungiendo
como polleros tanto de indígenas mexicanos como hombres y mujeres de
Guatemala, El Salvador y Honduras que buscan llegar a Estados Unidos…
Al llegar una persona a un cargo
público, no se convierte en pollero, sino que es este pollero el que se
convierte en presidente municipal, es de su negocio ilícito de donde
obtiene los recursos para poder financiarse una campaña política,
incluida la compra de votos, lo que lo lleva a ganar. Así quien se
dedica a pasar gente al otro lado, se les facilita el
trabajo, teniendo mayor acceso a recursos económicos para poder ampliar
sus redes, las cuales se interconectan por todo el país”, da a conocer
el miembro de la CIMICH.
Explica que siendo ediles, el proceso
es “muchísimo más fácil”, porque mantienen mayor número de contactos y
accesos con mayor facilidad, “porque ellos tienen carta abierta para
corromper las leyes, sin que nadie les diga nada en cualquier municipio
y estado”. En San Juan Chamula este tipo de ilícitos se vienen
perpetrando desde hace tres presidentes municipales, incluyendo al
actual, “todos ellos son polleros, la gente lo sabe y ha solicitado su
servicios, a mí me han dado a conocer que tienen una red a lo largo y
ancho del país y las ganancias millonarias que les deja”.
Según la fuente entrevistada, “el
actual presidente se dedica a cruzar migrantes, y lo ha hecho durante
muchos años, las autoridades estatales saben de dicha situación sin
embargo bajo la excusa que la comunidad es autónoma, han decidido no
intervenir, además que nadie lo denuncia, porque lejos de tener miedo
es como parte de servicio que muchos necesitan para poder llegar a
Estados Unidos…
Aunque se dice que San Juan Chamula es
una tierra dominada por indígenas, esa no es la realidad, ya que son
los caciques los que mandan y que dominan al pueblo, esta problemática
como muchas otras se encubre bajo la idea que los indígenas deciden
sobre sí mismos, esta mentira provoca que no estén protegidos, pues
ninguna autoridad estatal muchísimo menos federal intervendrá de
suceder algo. Finalmente aunque sabe que los presidentes municipales
son polleros, es un secreto a voces y ninguna autoridad interviene”.
El mecanismo de transportación, usado
por estos ediles, es la vía terrestre, todo aquel que tenga dinero o
una propiedad, que pueda pagar el viaje a Estados Unidos, se le
traslada en transporte público o carros particulares, propiedad de los
presidentes municipales, en ambos casos van acompañados de personas que
pertenecen a la red delincuencial de estos servidores públicos.
La red de ‘trabajo’, conformada por
diversos grupos que se interconectan por toda la ruta migrante, también
se encuentra coordinada desde San Cristóbal hasta la frontera de
Guatemala, a fin de captar migrantes provenientes de Centroamérica.
“Aunque no es una situación recién surgida, no resulta fácil hablar de
ésta, porque es un gran negocio que incluye millones de pesos y nexos
delincuenciales de presidentes municipales (principalmente del PRI y
ahora del PVEM), provoca el miedo denunciar porque, en mi caso me
enfrentó a gente con mucho poder y dinero, si hoy yo permito que se
publique mi nombre, mañana seré perseguido y pasado posiblemente me
hayan quitado la vida”, sentencia el miembro de CIMICH.
Además explica que, pese a las
conexiones, el pollero no garantiza al migrante su pase seguro a
Estados Unidos, “a mí me han comentado los pobladores que por 15 mil
pesos, hasta hace tres años tenían la oportunidad de tres intentos, si
no lo lograban se olvidaban del dinero o de su propiedad, pero en los
últimos dos años, son pocos los que pueden tener ese mismo número de
oportunidades, ya que a la mayoría nada más les dan uno, pero la
cantidad ha aumentado, y ahora van de los 20 mil a los 25 mil pesos,
partiendo desde San Cristóbal con destino Arizona…
Si el migrante quiere que desde el
punto anterior lo trasladen a otro sitio en específico ya es un pago
extra, dependiendo de la lejanía, pero la cuota más económica inicia en
10 mil pesos. En la mayoría de las ocasiones, los ediles, garantizan
cruzar por el desierto, ya que tienen contactos con la mafia de esa
zona, aunque no se hacen responsables si en algún momento las
autoridades americanas los descubren y los deportan, que es lo que
provoca que nuevamente regresen a San Juan Chamula, pero ya no tienen
un lugar donde vivir y no les queda de otra que mudarse a otros
municipios para sobrevivir…
Muchos indígenas producto de esta
situación se ha ido de la comunidad, algunos incluso tienen que vivir
en las calles de distintos estados, a los que se atrevieron a ir
pensando que podrían obtener un patrimonio, en entidades como Veracruz,
Zacatecas, Oaxaca y Yucatán, se puede localizar con mayor frecuencia a
compañeros de San Juan Chamula”.
Otro tipo de dificultad a la que se
enfrenta el migrante de San Juan Chamula, es que aunque se supone que
tienen facilidades de paso libre por toda la República, muchas veces
son confundidos con centroamericanos y al no tener credencial de
elector son deportados hasta Guatemala, ya que Migración asegura que
son extranjeros.
La situación en San Juan Chamula sobre
la migración ya es generalizada, no hay mayor número de hombres
intentando llegar a Estados Unidos, hoy a la par de ellos, están las
mujeres y los niños, dicha situación se da a raíz de la pobreza que
embarga y penetra en las comunidades indígenas, a las que se les
mantienen en el olvido y según activistas, se busca mantenerlos lejos
del progreso.
Lo que en un principio se presentó como
una nueva salida, una nueva forma de tener más ingresos, terminó
aumentado el problema económico de muchas familias de esa comunidad
A partir de 2006 según cifras de
informes de organismos civiles, existe mayor número de chiapanecos
indígenas intentando cruzar la frontera, que guatemaltecos,
salvadoreños y chinos, ya que han llegado a cruzar más de 100 mil
jóvenes por año, en un estado de aproximadamente 4 millones de
habitantes.
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