Utopía
Eduardo Ibarra Aguirre
Conforme llega a sus días decisivos la madre de todas las batallas entre el cambio de rumbo inaugurado el 1 de diciembre de 1982 y el que le antecedió, consistente en modificar los artículos 27 y 28 de la ley de leyes para presuntamente modernizar a Petróleos Mexicanos, los operadores políticos del poder muestran una firmeza en sus decisiones que es difícil no confundirla con intransigencia, y la decisión de imponer su proyecto legislativo que se emparenta con la imposición.
Así lo dijo el jefe de los senadores del Revolucionario: "No habrá nada que detenga al Senado para sacar las reformas que México requiere, entre ellas la energética".
Y nada es exactamente eso, como lo evidencian los 3 mil 400 policías federales y capitalinos comisionados y sus 1.2 kilómetros de vallas metálicas, con más de tres metros de altura desde el viernes 29. Tan estricto es el control que los senadores que rechazan la iniciativa de ley de Enrique Peña, tienen dificultades para ingresar al costosísimo como deficiente edificio de Reforma e Insurgentes.
Como el 1 de diciembre de 1988 para imponer a Carlos Salinas como titular del Ejecutivo federal, los senadores del tricolor fueron acuartelados en los hoteles de la zona, en especial el Sevilla Palace. Hasta en los detalles repiten el grotesco parecido con el inicio del sexenio que consumó el más brutal saqueo de recursos nacionales para beneficio del grupo en el poder, socios y familiares hoy premiados por jueces al regresarle al "Señor 10 por ciento" dineros y propiedades.
Salinato que es fuente de inspiración de la vocación reformista de los que buscan "¡Mover a México!" sin reparar en sus electores que no conocieron durante la campaña presidencial la agenda del Pacto por México. Esto es, un gobierno de coalición de facto (Fabio Beltrones dixit), en contraposición a la arquitectura jurídica de la nación y la queja permanente de legisladores que, denuncian, votan lo acordado por las cúpulas de los partidos firmantes, como el de la Revolución Democrática que se retiró cuando no le quedó de otra.
Para explicar ese abandono del pacto, Peña Nieto dijo que nunca se buscó la unanimidad sino la construcción de consensos amplios y que las mayorías son las que deciden en nuestro país.
Mayoría legislativa que, como dice María Marván, presidenta del IFE, se construyó al convertir la reforma electoral avalada por el Senado en "una ficha de cambio que se juega en la pista de una confusa reforma energética". Además es una mayoría que no guarda la menor correspondencia con el sentir y el pensar de las mayorías, pues las encuestas demuestran que 65 por ciento se opone a la privatización de Pemex. Y los dirigentes del establecimiento no se atreven a desmentirlas a pesar de que están muy desprestigiadas, debido a que ellos las convirtieron en instrumento de propaganda e inducción del voto en julio de 2012.
La voluntad ciudadana es lo que menos importa a los gobernantes, pues si la respetaran no ocuparían los espacios institucionales que tienen y tampoco cuidan las prácticas parlamentarias que obligan a hacer del conocimiento de los integrantes de las comisiones involucradas en la reforma energética el proyecto de dictamen, mismo que David Penchyna maneja como si fuera de su propiedad. Práctica que también ejerce el panista Jorge Luis Preciado.
Para completar el deplorable cuadro, el hidalguense jura que "es un debate en el que esta nación lleva 15 años debatiendo lo mismo". Será discutiendo porque debate implica escuchar al otro, diálogo; en cambio es poco convincente la foto que ya da la vuelta a la aldea global, con las dos sedes del Legislativo convertidas en búnkeres.
Acuse de recibo
Apunta el asesor jurídico Francisco Canudas: "Te distraigo para que por tu amable conducto, propongamos el nuevo nombre del PRI, sería Partido Reeleccionista Institucional, eso le ahorraría millones de pesos a los mexicanos, por el cambio de siglas y todo lo que conlleva; al mismo tiempo me hago la pregunta de qué lado está la virgencita de los mexicanos que el próximo 12 festejarán con tanta devoción los ricos o sus devotos jodidos; te agradezco al mismo tiempo la primicia de la salud de Andrés Manuel (López Obrador), el sector gubernamental está de plácemes"… Para la abogada Norma Falcón Ruiz "El ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas es un factor de unidad, de múltiples reflexiones para congregar los mejores exponentes en puntos diferenciales y capaces de llegar a una conciliación (…)" Acerca de lo publicado sobre el enlace civil (29-XI-13) entre Abraham Conde y María Luisa I. Erreguerena, el editor Ramsés Ancira apunta: "Apenas habré tenido cinco minutos de convivencia con la bella María Luisa, pero no deja de emocionarme que la que conocí niña entre hermanos varones inicie tan importante capítulo de vida. Buen trabajo del padre, y supongo de la madre también"… Teresa Gurza, la periodista, agrega: "Felicidades querido Ibarra, ya eres suegro; y espero que pronto seas abuelo... y un abrazo a los novios".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario