Ha surgido, con intenciones de extenderse activamente por el país, una nueva etiqueta de trabajo político y social, las
autodefensas ciudadanas. Como personajes centrales están los polémicos y zigzagueantes líderes del movimiento surgido en Michoacán, el médico José Manuel Mireles y el agricultor Hipólito Mora, quienes unos días se muestran con subidos ánimos de colaboración con el gobierno federal y otros, los más recientes, se distancian de funcionarios y políticas federales y estatales y los confrontan, envueltos ambos en diversos momentos en situaciones confusas que no han merecido de parte de ellos aclaraciones contundentes y convincentes.
Otro segmento lo forman distinguidos sacerdotes católicos que desde
su fe han ejercido un muy respetable y valioso trabajo de
acompañamiento y defensa de causas populares y derechos humanos, el
obispo de Saltillo, Raúl Vera, y Alejandro Solalinde. A ese abanico se
suman personalidades con acento partidista, como el ex gobernador
panista de Baja California, actual senador, Ernesto Ruffo (quien
aseguró ayer en su discurso que él siempre ha sido un autodefensa,
luego de haber sido amablemente presentado como
autodefensa frente a las estructuras de gobierno corruptas) y el abogado y catedrático Jaime Cárdenas, quien ha participado en el primer círculo de la asesoría y representación jurídica de movimientos encabezados por Andrés Manuel López Obrador.
El
motor inicial del evento, escribió Arturo Cano en su reporte al portal de La Jornada, fueron dos hermanas de apellidos Vázquez Alatorre. Selene Lucía, quien fue secretaria de política social (de 2008 a 2011) con Leonel Godoy como gobernador y, a nombre del sol azteca, senadora suplente (titular en un breve periodo final, cuando Silvano Aureoles solicitó licencia para buscar una diputación federal) y actualmente diputada local independiente que preside la comisión de justicia del congreso michoacano (selenevazquez.com). Y Talía, cuyo nombre ha estado muy presente en medios informativos por haber acusado de violación a quien era su esposo, Juan Iván Peña Neder, ex funcionario de la secretaría de Gobernación, a quien ha señalado como partícipe de múltiples maniobras irregulares en materia de licencias para casinos y, en este mismo contexto de los negocios de azar, al senador calderonista Roberto Gil Zuarth, quien interpuso y ganó, en septiembre del año pasado, una demanda por daño moral contra la propia Talía que le había acusado de recibir un maletín con 800 mil dólares para autorizar la apertura de un casino en Querétaro (http://bit.ly/1nWg8gh).
Hasta ahora, los resolutivos judiciales han sido marcada y
consistentemente adversos para Talía Vázquez Alatorre en cuanto al caso
de violación, estando pendiente una resolución en segunda instancia. Es
decir, a contracorriente de la amplia solidaridad de género que se ha
manifestado a favor de la parte acusatoria, las pruebas y señalamientos
contra el presunto violador no han sido considerados como indicativos
de culpabilidad de Peña Neder, al menos en la primera instancia
judicial (más allá de apasionamientos, la historia del proceso judicial
en mención es merecedora de serio interés jurídico, y los entretelones,
dignos de novela negra, con corrupción, riqueza proveniente de
relaciones con las élites del poder político, venganzas y abusos). En
el natural cruce de acusaciones que suele darse en estos casos, a la
propia Talía la han señalado como socia del llamado zar de los casinos, ahora caído en relativa desgracia, Juan José Rojas Cardona, y como accionista de ese tipo de negocios
en Guanajuato, Michoacán y Nuevo León(http://bit.ly/1k4Ek0v).
A
pesar de tantos ingredientes polémicos, en cierto segmento social
genera esperanzas el llamado a que cada quien se constituya en
autodefensa ciudadana, ante el fracaso estruendoso de las estructuras
institucionales. La reunión de ayer es uno más de los esfuerzos en
busca de aglutinar y vertebrar la inconformidad ciudadana que no
encuentra líderes confiables y eficaces ni organización adecuada para
expresarse y luchar (un antecedente de esos esfuerzos voluntariosos,
pero insuficientes, ha sido el Congreso Popular, cuyo mayor logro hasta
ahora ha sido su promisoria asamblea constitutiva, meses atrás).
Más que Mora, es Mireles el nombre que más confianza genera entre
quienes aún creen posible rescatar algo del proceso manipulado por
Gobernación de impulso y protección a lo que ahora son las fuerzas
rurales (a las que Mora pertenece como comandante y a las que Mireles
pretendió inscribirse con
su gente, aunque el comisionado Castillo le cerró las puertas). Del ex gobernador autodefensa, Ruffo, tal vez sus propios paisanos puedan dar cuenta del talante que ejerció como autoridad, y de los resultados que obtuvo en el combate (o no) del cártel próspero de aquellos años, el de los hermanos Arellano Félix.
Para dar ejemplo de presiones a los consejeros del INE que en
próximos meses designarán consejeros electorales estatales, Lorenzo
Córdova dijo que uno de los aspirantes a estos cargos locales visitó
recientemente a una de las autoridades federales insistiéndole en que
llevaba especiales saludos de su gobernador (no se especificó si el
saludo llevaba resonancia metálica). La anécdota permitió a Córdova
filosofar diciendo:
El problema es cómo vamos construyendo autonomía siendo refractarios a esas presiones y logrando, por otro lado, mantener canales de comunicación con todos los interlocutores políticos y sociales que podamos. Ah, pues sí.
Y, mientras sabemos si habrá protestantes tiempos extras o incluso
tandas forzadas de penales de parte de algún segmento de la afición
popular que pretenda romper tanto el anunciado resultado final como el
sugerente empate Mundial-sesiones del congreso, en materia energética,
arreglado por el parcial árbitro mexiquense empeñado en darle el gane a
los extranjeros (y a los comisionistas de casa), o si todo quedará en
meros tiritititos opositores simbólicos y en peloteos partidistas que
no lleguen al área de peligro, ¡hasta mañana!
Twitter: @julioastillero
Facebook: Julio Astillero
Fax: 5605-2099 • juliohdz@jornada.com.mx
El
secretario de Hacienda del salinismo, Pedro Aspe Armella, escribió en
Twitter: ‘‘México tiene 0.1% de (posibilidades de) ganar el Mundial:
Goldman Sachs’’. Su nombre en la red es @PedroAspeA. No es un pronóstico personal, sino del grupo financiero Goldman Sachs. De acuerdo con el estudio The World Cup and Economics 2014,
sus analistas predicen que la selección nacional empatará con Camerún
en su primer encuentro 1-1, perderá ante Brasil 4-1 y empatará ante
Croacia en el tercer encuentro 1-1. Tiene 36.2 por ciento de
probabilidad de pasar a octavos de final; 7.7, a cuartos; 2.8, a
semifinales, y 0.7, a la final. Sólo un milagro haría que ganara la
copa: tiene 0.1 de posibilidades. ¡Pintan mejor las probabilidades de
mejoría de la economía nacional… y eso que están muy descoloridas! Hay
un día clave para México en el torneo: el 17 de junio. Habrá doble
goleada. Una en el Senado, cuando los ratoncitos verdes de las
comisiones dictaminadoras se reunirán para aprobar la legislación
secundaria que envió Peña Nieto como complemento de la reforma
energética. Consumarán la privatización del petróleo y la electricidad.
Y ese mismo día, los ratoncitos verdes del futbol se enfrentarán con
Brasil. No es coincidencia. Sencillamente quieren que la gente esté
absorta en la televisión. Cuando se votó la reforma constitucional
también se escogió una fecha ad hoc: el 12 de diciembre, día de la Virgen Guadalupana. El PRI, el PAN y el Verde tienen los votos necesarios. Los chuchos votaron desde antes, cuando firmaron el Pacto por México.
¿No te preocupes, Pedro Joaquín?
Habrá, en forma paralela, un tercer tema esos días. La
denuncia de un grupo de senadores del PRD para que el presidente del
consejo de administración de Pemex y secretario de Energía, Pedro
Joaquín Coldwell, sea separado de su cargo. Lo acusan de que tiene un
conflicto de intereses, ya que al mismo tiempo hace negocios con
Petróleos Mexicanos. Con su familia posee un centro de distribución de
gasolina y varios expendios en Chetumal. El tema fue llevado ayer a la
tribuna de la Comisión Permanente por la senadora Dolores Padierna.
Pidió a Peña Nieto que lo destituya. La Presidencia de la República ha
guardado silencio hasta el momento. ¿No te preocupes, Pedro Joaquín?
Vuelven a pagar impuestos
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) ha
recaudado a marzo de este año 2 mil 300 millones de pesos de
contribuyentes incumplidos que decidieron regularizar su situación
fiscal a partir de que se empezaron a publicar las listas de deudores,
las también llamadas ‘‘listas negras’’. En perspectiva, como se observa
en la gráfica, los ingresos del Estado han tenido una tendencia al alza
en los años recientes. Los gobiernos panistas no tuvieron compasión de
los contribuyentes, inventaron los gasolinazos, el IETU y el
IDE. Siempre mantuvieron la amenaza de cobrar IVA en alimentos y
medicinas. El gobierno priísta, aunque no intentó gravarlos, también
está apretando duro. La Ley de Ingresos de la Federación para 2014
contempla que, incluso habiendo desaparecido el IETU y el IDE, se
alcance un monto de 1.8 billones de pesos por ingresos tributarios,
esto gracias a los nuevos impuestos sobre alimentos altamente
calóricos, el IEPS a las bebidas azucaradas, la homologación del IVA en
la frontera, el gravamen a alimentos de mascotas, ampliación del ISR
hasta 32% y el impuesto a las transacciones en la Bolsa de Valores de
10%. El titular del Servicio de Administración Tributaria, Aristóteles
Núñez, sostiene que la expectativa de recaudación de impuestos de
personas físicas y morales resultantes de la reforma hacendaria sería
de 180 mil millones de pesos adicionales.
En su desesperada misión de convencer a propios y a extraños de que todo marcha muy bien y que él es el bueno, el
ministro del añono pierde foro ni micrófono para defender las migajas y repetir que a este heroico país le espera un futuro venturoso gracias a un modelo económico que ha fallado, año tras año, a lo largo de tres décadas y pico.
Insiste, por ejemplo, en que si bien
crecera una tasa de 2.7 por ciento es
abiertamente insuficiente, la buena noticia es que esa raquítica proporción resulta
un poco mayor a lo que hemos crecido en promedio en los últimos 30 años, que ha sido de 2.4 por ciento, o crecer un poco más de lo que hemos crecido en los últimos 13 años, donde el crecimiento ha sido de 2.3 por ciento. Entonces, según él, 0.03-0.04 puntos marca la diferencia y delinea ese futuro maravilloso que le espera a los sobrevivientes de esta República de discursos. ¿En serio?
Pero más tardó Luis Videgaray en celebrar lo que, según él, se
avecina que el Bank of America Merrill Lynch en ponerle otro clavo al
ataúd:
la economía mexicana todavía está en recesión; es decir, exactamente lo contrario de lo presumido por el
ministro del año, quien acumula varias semanas intentando, sin lograrlo, desmentir todo lo que le lleve la contraria, comenzando por la realidad.
De acuerdo con la financiera estadunidense, “nuestro indicador de
recesión señala que durante la mayor parte del primer trimestre México
estuvo todavía en recesión. Igualmente, con las series revisadas,
nuestro indicador ahora señala que la recesión podría haber empezado en
el cuarto trimestre de 2012, lo que significaría que la economía
mexicana pudo haber estado en recesión por seis trimestres… la
probabilidad de que se mantenga el ciclo en esta trayectoria durante el
segundo trimestre de 2014 es de 85 por ciento” (La Jornada, Roberto González Amador). Acto seguido, recortó su proyección de
crecimientoeconómico en el país a 2.5 por ciento, aún inferior al de por sí reducido pronóstico de la Secretaría de Hacienda.
Cómo olvidar que un par de semanas atrás y durante su feria mediática Luis Videgaray aseguraba que
la economía mexicana definitivamente no está en recesión. No lo estuvo en 2013 y estamos creciendo este año. Sería abiertamente incorrecto hablar de que una economía que está creciendo, y creciendo de manera más acelerada que el año pasado, estuviera en una recesión(el coro fue por cortesía del secretario del Trabajo, Alfonso Navarrete Prida:
la economía mexicana está lejos de tener una recesión y sus perspectivas de crecimiento en el segundo semestre del año son alentadoras). Pues bien, muy pocos –cada vez menos– comparten la alegría del
ministro.
De cualquier suerte lo anterior es lo de menos, porque al final de cuentas no hay diferencia real si la economía mexicana
crece2.7 por ciento, como lo supone Videgaray, o 2.5 por ciento, como lo estima Merrill Lynch, en el entendido de que se requiere mínimo 6 por ciento sostenido para comenzar a salir del profundo hoyo en el que cayó la economía nacional hace ya bastantes ayeres.
El
ministro del añointenta convencer a una sociedad cada vez más golpeada por el modelo económico que él defiende a capa y espada (al igual que sus antecesores en Hacienda durante los cinco gobiernos anteriores al de Enrique Peña Nieto), el mismo que a lo largo de tres décadas y pico ha demostrado fehacientemente que sólo ha servido para hundir al país. Si bien ha sido altamente productivo para el grupúsculo en el poder, para la clase político-empresarial, ni de lejos ha sido útil para la mayoría de los mexicanos que ya no sienten lo duro sino lo tupido.
El
remate de los bienes nacionales tuvo en los días finales de la
administración de Felipe Calderón un colofón digno y a la altura del
grupo depredador encumbrado en el poder del país cuando una triada hizo
lo que se le antojó con la red carretera nacional, violentando normas
jurídicas y despojando a una institución pública como Caminos y Puentes
Federales (Capufe) de las autopistas federales de cuota de mayor
rentabilidad para entregárselas a la iniciativa privada.
Los secretarios de Comunicaciones Pedro Cerisola y Weber, Juan
Francisco Molinar Horcasitas y el veracruzano Dionisio Pérez Jácome
entregaron 19 autopistas federales de cuota a la IP, incumpliendo la
normatividad vigente, sin autorización del Congreso de la Unión, con
engaños y ampliación ilegal de los plazos de vigencia de las
concesiones, según la denuncia ante la Secretaría de la Función Publica
que presentó esta semana el Sindicato Nacional de Caminos y Puentes
Federales de Ingresos y Servicios Conexos.
Empresarios nacionales y extranjeros, en forma encubierta, se
apropiaron de una parte sustantiva de las autopistas nacionales de
cuota más redituables, construidas además con recursos públicos y
entregadas mediante erogaciones simbólicas a la iniciativa privada por
vía de mañosos artificios legales.
La
firma estadunidense Bank of America-Merrill Lynch afirmó ayer que la
economía mexicana está en una recesión que posiblemente se haya
iniciado en el último trimestre de 2012. Tal afirmación viene precedida
de las críticas formuladas el pasado 23 de mayo por la revista The Economist y el diario Financial Times
al proyecto económico del presidente Enrique Peña Nieto y a los
constantes reajustes de las autoridades mexicanas sobre las
expectativas de crecimiento económico, lo que a decir de esas
publicaciones genera desconfianza entre inversionistas potenciales. En
un sentido similar se ha venido pronunciando el Centro de Estudios
Económicos del Sector Privado, el cual afirmó la semana pasada que lo
que parecía un retraso en la recuperación del país se convirtió
en una recesión, y cuestionó que las autoridades hacendarias y económicas del país se nieguen a admitir dicho escenario.
Ejemplo invaluable, actuación de Fernando Montes de Oca
Hace 185 años, el 29 de mayo
de 1829 nació en Azcapotzalco, Fernando Montes de Oca, quien a los 18
años murió heroicamente, el 13 de septiembre de 1847 en el Castillo de
Chapultepec, enfrentando voluntariamente a los invasores
norteamericanos. Junto a los demás cadetes del Colegio Militar, nos
dejó un ejemplo de valentía y patriotismo. Los cadetes y el Batallón de
San Blas, en lucha cuerpo a cuerpo, resistieron heroicamente el asalto
de las tropas extranjeras, muy superiores en número y armamento, y
mantuvieron en jaque durante dos días al ejército enemigo. Fue Fernando
Montes de Oca,
orgullosamente chintololo, quien se lanzó al vacío desde la azotea del Castillo de Chapultepec para evitar que el enemigo se apoderara de la bandera mexicana.
La
evolución reciente de la actividad económica mundial y de las
industrias extractivas y de transformación ha sufrido cambios
dramáticos, que atentan contra la vida y la salud de los trabajadores.
El propósito de crecer y de generar ingresos a cualquier costo ha
deshumanizado los procesos productivos, así como el comercio de bienes
y servicios.
En
lo que va de 2014 ha habido elecciones en un gran número de países, y
habrá más antes del fin del año. Las hubo en Panamá y Colombia y las
habrá en Brasil. En Malawi y Sudáfrica también acudieron a las urnas.
En Afganistán e Irak los procesos electorales fueron sorprendentemente
limpios y pacíficos.
Casi
todos los pueblos en México con nombres de santos y apellidos indígenas
son supuestamente originarios. Pero no es exacto, pues muchos de ellos
no existían antes de que llegaran los españoles a conquistarnos. En
algunos, los curas conquistadores hicieron hospitales y/o templos
religiosos y les pusieron un nombre, luego llegaron habitantes de otros
lugares o los que ahí vivían y les pusieron, respetando la nomenclatura
hispana, añadidos en náhuatl u otras lenguas indígenas. Es el caso de
San Bartolo Ameyalco, y pegado a éste el de Santa Rosa Xochiac. Sus
pobladores en la actualidad son en su mayoría mestizos, tanto o igual
que yo y, desde luego, no practican religiones prehispánicas ni
necesariamente hablan lenguas antiguas.
El
resultado de las elecciones europeas da cuenta de la crisis real en la
que se halla el andamiaje político construido durante las últimas
décadas: el ascenso de los llamados
euroescépticos, fórmula genérica para nombrar a las más variadas expresiones de la disidencia, hizo temblar el viejo bipartidismo dominante y abrió grandes avenidas de temor e incertidumbre (y unas cuantas de esperanza). Ahora es más obvio que nunca que la crisis no está resuelta, luego de años de austeridad y recortes, de exigirle a la población sacrificios sin fin a cambio de evitar un cataclismo peor. Con todo y sus retrocesos, Alemania conserva la hegemonía mientras las opciones
alternativasse quedan en el camino, desdibujadas, sin una idea clara de cómo enfrentar los acontecimientos. La caída del voto socialista en Francia y en España es prueba suficiente de una derrota que ya no puede entenderse, menos corregirse, con el silabario de otros tiempos. Mientras las conquistas del Estado de bienestar son derribadas una a una, la resistencia se fragmenta en una miriada de protagonistas que aún no alcanzan ni el peso ni la representación para evitar su desmantelamiento, la precarización del trabajo, el reacomodo en la economía global que intensifica la desigualdad, como se advierte en estudios contundentes que hoy circulan en todo el mundo.
Los
perjuicios de la prueba PISA –aplicada e interpretada por la OCDE– han
sido señalados por una centena de distinguidos académicos de 10 países
desarrollados, todos ellos reconocidos especialistas en educación, en una carta publicada el pasado 6 de mayo en el diario británico The Guardian. Esta prueba PISA, desacertada iniciativa del
club de países ricos, se suma a otros traspiés que en materia educativa ha cometido ese organismo a lo largo de su historia.
La
segunda vuelta de las elecciones presidenciales colombianas el 15 de
junio tendrá una excepcional trascendencia para América Latina y el
Caribe.
Toda
pretensión de benevolencia con que la propaganda adorna el ejercicio de
poder doméstico o internacional de EU se desmorona desde la guerra de
agresión desatada en 2003 por el petróleo de Irak y el régimen que
siguió bajo la batuta de EU, con las imborrables imágenes del bombardeo
contra la población de Bagdad y de la tortura en Abu-Graib. El
tufoque emanó a la sombra del 11/9 de 2001 y su cauda de leyes marciales y concesión de poderes de guerra al Ejecutivo, bajo la
guerra de auto-defensa anticipatoria, recordó el uso nazi del incendio del Parlamento Alemán en 1933, como dijo Golo Mann,
para la manufactura de poder. Después de la Segunda Guerra Mundial y en paralelo con reveses militares en Corea y en Vietnam, se acentuaron, a decir de Gabriel y Joyce Kolko, los
límites del poderde EU, en particular ante una persistente multipolarización, desde los años 70, en materia industrial, de alta tecnología y de una sensible pérdida de control corporativo sobre las reservas mundiales de hidrocarburos que pasaron a ser bienes públicos.
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