El historiador Lorenzo Meyer señaló que el PAN, que nació como un partido para predicar con el ejemplo y señalar la corrupción, ha perdido su esencia, pues ahora tiene en su interior las fallas y errores que criticaba en el PRI.
"El PAN está enfermo de lo mismo que acusó al principio: de la corrupción.
"Se hace un nuevo animal político con el mismo nombre. El nombre es el original, el contenido ya dejó de tener sentido. Entonces sí se explica uno el Gobierno de (Vicente) Fox, el Gobierno de (Felipe) Calderón, la ausencia de llamar a cuentas", indicó.
Durante la presentación del libro "La mancha azul; del PAN al neoPAN y al PRIoPAN", de Jorge Eugenio Ortiz Gallegos, Meyer expuso que el PAN nació en 1939 no con la intención de gobernar, sino de hace patentes las incongruencias del sistema, siendo la falla central la corrupción.
Consideró que los problemas en el PAN comenzaron cuando alcanzaron el poder, a finales de la década de los ochenta, cuando dejaron entrar a un grupo de empresarios del norte del País que decidieron "mandar de vacaciones" a la doctrina.
"La pregunta es, ¿el PAN una estructura ya a la que se le quitó su esencia y es nada más una maquinaria burocrática, y entonces no tiene realmente ya un destino, o va a hacer otra cosa y le van a dar otro tipo de vitalidad?
"Desde esta perspectiva (del libro) ya es un cascarón, un cascarón con mucho dinero, pero es un cascarón sin vitalidad", cuestionó el académico de El Colegio de México.
En tanto, el ex militante panista Jesús González Schmal recordó que tanto él como el autor del texto, Ortiz Gallegos, renunciaron al PAN por considerar que no podían ser cómplices de una institución que incumplía sus propósitos y que se entregaba a los intereses oligárquicos.
Manifestó que la decisión fue difícil pero imprescindible.
"Fue un choque tremendo, porque desde nuestra juventud nosotros nos adherimos a esa causa porque la concebimos noble, importante y trascendente para México, luchar contra un unipartidismo, contra la concentración del poder y establecer en México un verdadero pluralismo político.
"Todo ese trabajo fue capitalizado por un grupo de vivales, de oportunistas, que habían quedado resentidos -como aquí lo señala Jorge Eugenio con toda precisión- habían quedado resentidos por la expropiación que López Portillo hizo de la banca nacional", expresó.
Dijo que aquellos que entonces habían jugado como grupos de presión y como asociados del Gobierno, a los que el propio Gobierno les ponía a considerar las políticas económicas, rompe con el poder y busca con otras trincheras con presencia política que le dieran posibilidades de compartir el poder.
"Fraguaron la infiltración al PAN. Fue cuando ese grupo de extrema derecha, grupos derivados de las Cámaras, de los grupos patronales, que tenían a su vez sus apéndices como el Yunque, como el Muro, como Ancifem, esos fueron gradualmente metiéndose al PAN llegando a apoderarse vía económica de muchísimas posiciones", denunció.
A la presentación del texto, que se realizó en el Club de Periodistas, acudió la hija del autor, Olinda Ortiz, quien dijo que su padre puso todo su empeño en concluir el texto, antes de que lo alcanzara la muerte en 2010.
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